Regreso de Irán al mercado petrolero acentuará déficit de divisas en Venezuela

El efecto del levantamiento de las sanciones internacionales a Irán en el precio del petróleo no se hizo esperar. Luego de que el fin de semana pasado se adelantó el regreso del crudo persa a un mercado donde ya existe una sobreoferta superior a 2 millones de barriles por día, las cotizaciones volvieron a caer y las proyecciones de los analistas es que el descenso se acentúe.

La Agencia Internacional de la Energía es uno de los organismos que sostiene que la caída del crudo se mantendrá. En su informe mensual afirma que el regreso de Irán ampliará la brecha que existe entre la oferta y la demanda. Agrega que el precio del barril, que ha cedido más de 75% en el último año y medio, podría llegar a 10 dólares, como han advertido bancos de inversión.

Analistas coinciden en que el retorno de Teherán afecta a todos los países productores. Sin embargo, advierten que una de las naciones más perjudicadas es Venezuela por la enorme dependencia que tiene de las divisas que ingresan por la venta de crudo. Además, el precio de la cesta nacional, que llegó a 21,63 dólares al cierre de la semana, está cerca del costo de producción.

“Sin duda el país más afectado es Venezuela. Rusia está teniendo fuertes problemas externos, pero ha dejado deslizar su moneda y eso ha hecho que el impacto en la economía doméstica no sea tan duro. Colombia devaluó e hizo ajustes en los gastos. México también está dejando deslizar su moneda. En cambio el gobierno nacional no hizo nada para que el país absorbiera mejor el efecto de la caída del petróleo”, afirmó el economista Luis Oliveros.

Bárbara Lira, analista petrolera de ODH Grupo Consultor, coincidió con Oliveros: “Tenemos una necesidad muy grande de dólares para atender el consumo y cumplir con los compromisos de deuda externa, y casi todas nuestras divisas provienen de la venta de crudo. Según el último reporte del Banco Central de Venezuela, 94% de los ingresos por exportaciones entraron por la vía del petróleo”.

Los analistas concordaron en que si las proyecciones de descenso en el precio se cumplen, en la nación se pueden agudizar las fallas de abastecimiento. “El petróleo es muy impredecible, pero si esto sigue vamos a ver una versión más profunda del desabastecimiento que hubo el año pasado. El gobierno optó por reducir las importaciones y eso significó menor disponibilidad de bienes finales y de insumos para la producción local”, dijo Lira.

Agregaron que por la escasez de divisas también se reforzó la posibilidad de que el país incumpla el pago de la deuda externa o haga default, como han adelantado algunos bancos de inversión.

Sin embargo, Oliveros indicó que aun cuando el gobierno decida dejar de pagar a los acreedores de bonos, el déficit de divisas no alcanza para cubrir el resto de los gastos que tiene el país. Si el petróleo promedia este año 30 dólares por barril, a finales de año harán falta 29 millardos de dólares. “La deuda externa son 10,5 millardos, aun cuando el gobierno decida dejar de pagarlos, eso solo representa un tercio de toda la plata que necesitamos”, reiteró.

Explicó que para que el país pueda cumplir con todos los pagos se necesitaría que el petróleo subiera al menos a 80 dólares por barril.

Otra vez a la OPEP. El ministro de Petróleo y Minería y presidente de Pdvsa, Eulogio Del Pino, apuntó que el precio de equilibrio del barril de petróleo debería alcanzar 60 dólares.

En una reunión mantenida el jueves con su homólogo de Ecuador, Carlos Pareja, expuso la necesidad de revisar los precios e insistió en la convocatoria que le han hecho a la Organización de Países Exportadores de Petróleo para que celebren una reunión en febrero. La OPEP no ha dado una respuesta oficial a la solicitud, después de conocerse la petición trascendió que representantes de algunos países miembros no la ven factible.

No es la primera vez que se hacen sesiones extraordinarias y aun así no se llega a acuerdos para bajar la producción. Arabia Saudita ha defendido en reiteradas ocasiones su deseo de conservar los niveles de producción actual como una estrategia para mantener sus cuotas de mercado y hacer menos rentable la producción de otros crudos.

Oliveros y Lira no creen que en una nueva reunión decidan recortar la producción. “Al contrario, luego de las reuniones de la OPEP, el crudo pierde en promedio 5% por falta de acuerdos”, dijo Oliveros.

LAS CIFRAS

28.000 barriles de petróleo por día dejó de producir Venezuela el año pasado, según datos de la OPEP

49,5% cayó el petróleo venezolano entre 2014 y 2015. De un promedio de 88 dólares por barril, bajó a 44 dólares

Trabajadores no tienen bragas, guantes ni zapatos

La explosión de un taladro en instalaciones de Petróleos de Venezuela en Anzoátegui, ocurrida la semana pasada, que causó la muerte del trabajador Félix Borges y al menos dos heridos, reactivó las alarmas sobre las condiciones en las que se encuentran las instalaciones de la principal empresa del país y la protección con la que cuentan sus trabajadores.

Dirigentes sindicales han denunciado en varias oportunidades que en las instalaciones de Pdvsa no se hace el mantenimiento necesario, lo que provoca que haya paradas no programadas. También han afirmado que en las refinerías escasean hasta los equipos de protección personal, que les permiten a los trabajadores resguardar su vida ante incidentes.

“Desde hace más de cinco años hemos venido presentando problemas en las instalaciones, y eso ha estado impulsado por el desvió de recursos para invertir en el mantenimiento. Esta semana a los trabajadores de las refinerías de Amuay y Cardón les dijeron que por este año no les entregarán las bragas y los zapatos que requieren, cuando deben reemplazarse cada tres meses. Tampoco les dan guantes”, informó Iván Freites, secretario ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela.

Agregó que la falta de inversión en mejoradores también ha incidido en el descenso de la producción de las refinerías y ha hecho que se importen más diluyentes para convertir el crudo en liviano y poder ponerlo a la venta. El incremento en la compra de nafta a su vez aumenta los costos de producción de los barriles.

El sindicalista indicó que la industria petrolera tampoco ha escapado a la migración de personal. “La nómina de la empresa pasó de 40.000 trabajadores en 2002 a más de 140.000 en este momento, pero no sabemos dónde están. En las refinerías de Falcón tienen que hacer guardias de 12 horas con 3 operadores, cuando debería haber 7. Muchos se van y la causa principal es los malos sueldos”, dijo.

Fuente: el-nacional.com