Petare, la opción cultural de este domingo

Rafa Pino y Edward Ramírez abren el telón

Faitha Nahmens

petareCon cultura resiste Petare, con cultura propone remediar, y la produce. No cesa su afanoso quehacer el Museo al que toman, como pájaros alborozados, los niños del barrio. No paran de crear los jóvenes actores –premiados- un mejor país en el Teatro. Este domingo 10 de abril la agenda está servida y deviene opción ineludible con una programación gratuita y seductora que involucra el circuito de arte del Casco Histórico. Alternativa para la reflexión, el reencuentro, el goce, Petare, contra viento y marea, desde las 11 de la mañana, se asume oasis en la colina de las casonas coloniales, referente caraqueño de tradición y -asombro mediante-, de paz.

A esa hora, en el patio central de Fundalamas, la casona amarilla sobre la plaza Sucre, Rafa Pino y Edward Ramírez ofrecen un concierto impelable. De buche –voz-, maraca y cuatro es la propuesta del dúo que interpreta temas de música folclórica, a su estilo. Suerte de joropo urbano, el joropo central reinventado y revestido con alusiones a lo citadino, los músicos caraqueños -el cantante de El Valle y el cuatrista de la parroquia Altagracia-, se juntan y hacen maravillas que erizan. Sonidos que son como un corrientazo. Energía. Una tisana con su pizca de alegría refrescará a los caraqueños convocados bajo el toldo.

A mediodía se inaugura en la sala 1, en la planta baja de Fundalamas, la exposición del artista Néstor Utrera. Creador que se estrena por primera vez en las paredes públicas, Utrera, un ingeniero devoto del arte de armar y también de todo lo contrario, juega lego con su pensamiento y muestra el proceso creativo como si fuera, ese tránsito, el arte; persuadido de que el laberinto del boceto puede enmarcarse. Él cuenta de los varios caminos por los cuales llegar. Por ejemplo, en la serie de autorretratos, recrea el modelo que espera la convención, el que se hace desde el espejo, pero también el autorretrato que es interpretación más sintética de sí, más humorística, un guiño: una abstracción.

En el Museo de Arte Popular Bárbaro Rivas de Petare, Juan Pestana, José Cheo Pérez y Juan Urbina coinciden en los espacios expositivos con sus objetos cotidianos, tallas y lienzos que retratan al hombre común y sus circunstancias, sombreros, tazones y cacharros en la escena cotidiana. Golfiaos en el entreacto donde Frank Suárez, a las 3 comienza La lección en el Teatro César Rengifo (calle Lino de Clemente). Obra de Eugene Ionesco que habla sobre el totalitarismo, sobre las posibilidades nunca remotas de transformación del débil en opresor, el montaje fue premiado en el festival de jóvenes actores.

Venir a la zona colonial de Petare es fácil: un autobús apostado desde las 10 de la mañana en el centro comercial Millenium aguarda a los caraqueños que transportará gratuitamente hasta el Casco y luego los trae allí mismo de regreso. También vale el Metro. Y sin duda, se llega más rápido venciendo prejuicios, como diría Héctor Torres, de esa manera es más grande la ciudad.

 

Fuente: Fundación José Angel Lamas