Cada vez es mayor el número de conductores que cuando llega el buen tiempo, deciden dejar aparcado el coche y realizar sus desplazamientos en moto. Los vehículos de dos ruedas ganan terreno en las ciudades y también precisan estar aseguradas para circular. ¿Conoce qué opciones ofrece el sector asegurador?
Todos los moteros que hay en España, que en nuestro país son legión, son conscientes de que junto a la compra de su vehículo de dos ruedas deben contratar su seguro correspondiente. Vamos a ver en resumidas cuentas cómo es el mundo en el que confluyen ambos sectores y los factores principales a tener en cuenta a la hora de contratar un seguro de moto.
A la hora de hablar de este tipo de pólizas no podemos dejar de lado una cuestión importante: debemos decidir si queremos contratar una cobertura determinada con o sin franquicia. En el primero de los casos el seguro cubrirá lo que hayamos contratado hasta los límites que se acuerden, mientras que en el segundo supuesto el pago se realiza a medias: en caso de un determinado daño a la motocicleta la aseguradora únicamente se hace cargo del importe de los gastos que sobrepasan la cantidad elegida por el cliente -franquicia-, mientras que este deberá abonar un importe económico que sea menor o igual a la cuantía fijada. Como es obvio, las coberturas franquiciadas resultan mucho más económicas dado que la protección que ofrecen ante las eventualidades es menor.
Por último hay que destacar también que los buenos conductores suelen tener una recompensa en forma de beneficios económicos. Numerosas compañías aseguradoras, al igual que sucede en el caso de los seguros de coche, incentivan la trayectoria positiva de los conductores seguros, los que pasados los años no han sufrido ningún percance o accidente, mediante la aplicación de diversos descuentos y bonificaciones.
Fuente: eleconomista.es