Según estudios clínicos, se estima que el 3% de la población mundial sufre de hiperhidrosis. Generalmente, tal como lo indica la Dra. Afonso, esta condición comienza en la infancia o adolescencia, existiendo distintos grados de intensidad, desde cuadros leves hasta cuadros severos que llegan al goteo en las manos.
Actualmente, existen diversos procedimientos aprobados por los especialistas en medicina estética y dermatología que ayudan a disminuir los efectos de la transpiración excesiva; a continuación los tratamientos más utilizados:
1. Medidas de uso domiciliario como antisudorales de uso tópico.
2. Medicamentos anticolinérgicos que actúan mediante la prevención de la estimulación de las glándulas sudoríparas en el cuerpo.
3. Tratamiento quirúrgico conocido como simpatectomía transtorácica, donde se eliminan los ganglios que estimulan la sudoración de axilas y manos.
4. Cirugía local, donde se eliminan las glándulas sudoríparas por medio de un curetaje subcutáneo.
5. Tóxina Botulínica, es la técnica utilizada por excelencia en medicina estética por su gran eficacia para inhibir la secreción de las glándulas sudoríparas. Consiste en la infiltración de la toxina en axilas, palma de manos o planta de pies. El procedimiento tiene una duración de aproximadamente 30 minutos y sus resultados pueden extenderse hasta 6 meses posterior a la aplicación.
Aunque la causa específica para librarse del sudor no está definida, la hiperhidrosis todavía puede tratarse eficazmente y de modo que reduzca las molestias y la vergüenza.
Fuente: BLUE MARKETING SOLUTIONS.